El proyecto de ley pretende otorgar herramientas a la Aeronáutica Civil para que disponga de medios efectivos con qué controlar la navegación aérea del país, especialmente en los casos de problemas presentados por las aves de carnaza en los aeropuertos.
Cuando la Unidad Administrativa Especial de Aeronáutica Civil detecte la presencia frecuente de aves en las inmediaciones de un aeropuerto dentro de un área de trece (13) kilómetros a la redonda de las cabeceras de las pistas del mismo, que pudiere constituir un riesgo para la seguridad de la navegación aérea, podrá tomar medidas cautelares como cierre temporal o definitivo de aquellas empresas que generen o propicien residuos sólidos orgánicos, y que a juicio de la Aeronáutica Civil estén contribuyendo a la presencia frecuente de aves en las inmediaciones de un aeropuerto.