El objeto de la gestión fiscal es la adecuada y correcta planeación, adquisición, conservación, administración, custodia, explotación, enajenación, consumo, adjudicación, gasto, inversión y disposición de los bienes públicos, o de los bienes privados recibidos por la administración pública en cu stodia, depósito, comodato, donación o cualquier forma de administración, así como la recaudación, manejo e inversión de sus rentas, en orden a cumplir los fines esenciales del Estado, con sujeción a los principios de la gestión fiscal y de la función administrativa consagrados en el artículo 209 de la Constitución Política.