El ponente de la iniciativa, que busca el recaudo de $200.000 millones, fue el senador José Alfredo Gnecco Zuleta.
Bogotá D.C., junio 8 de 2016. La ponencia, que recibió el respaldo unánime de los miembros de la Comisión III de Senado, defiende el propósito del Proyecto de Ley 185 de 2016, que es darle continuidad al recaudo de la estampilla Pro-Desarrollo Fronterizo hasta por $200.000 millones.
El senador José Alfredo Gnecco Zuleta, respaldó y rindió ponencia positiva del mencionado Proyecto, que en esencia plantea la modificación del artículo 49 de la Ley 191 de 1995, a través del cual se les dio autorización a las asambleas de los departamentos fronterizos para que ordenaran la emisión de la estampilla con las que se recaudarían hasta $100.000 millones.
“El producto de ese recaudo, está destinado a la financiación del plan de inversiones en las zonas de frontera en materia de infraestructura de transporte, infraestructura y dotación en educación en todos sus niveles, preservación del medio ambiente, agua potable, saneamiento básico y otros componentes del desarrollo social”, explicó Gnecco Zuleta.
No obstante, departamentos como La Guajira, que alcanzó el tope de los $100.000 millones, y el Cesar, que está a punto de completar el recaudo por el mismo orden, dejaron y dejarán de percibir miles de millones de pesos, que son destinados a programas que impulsan el desarrollo de las comunidades.
“La Universidad de La Guajira, por ejemplo, desde el año anterior ha dejado de recibir más de $9.000 millones que antes percibía del recaudo de la estampilla, truncando con ello la inversión en proyectos de investigación y tecnología y en formación de alto nivel”, aclaró el Senador.
Tras el respaldo recibido en la Comisión III, el Proyecto de Ley pasará a plenaria de Senado, donde se espera su aprobación definitiva. El recaudo de la estampilla Pro Desarrollo Fronterizo, que ahora alcanzará un tope de $200.000 millones, permitirá que se siga promoviendo el desarrollo económico, social, científico y cultural de las zonas de frontera colombianas, entre ellas La Guajira y el Cesar.