Dragas de dos pisos están ‘matando’ uno de los afluentes más importantes del departamento del Chocó. De acuerdo a las denuncias del senador Antonio Navarro Wolf, hay una migración de mineros brasileros a Colombia. El congresista pide controlar el deterioro a la naturaleza.
A pesar de los operativos realizados en años anteriores, dragas gigantescas de dos pisos, siguen deformando la rivera del Río Quito, en el departamento del Chocó. La maquinaria avaluada en unos 40 mil millones de pesos es usada en la minería ilegal, cuyos ‘patrones’ son brasileros expulsados de su país.
La denuncia la realizó el senador Antonio Navarro Wolf, quien sobrevoló el Río Quito, encontrando un grave daño ambiental que contaría con la anuencia de los pobladores de la región. El congresista aseguró que mal contadas hay entre 50 y 60 dragas, avaluadas en unos 50 millones de pesos cada una.
“Tomamos fotos de lagunas azules, preciosas, que son simplemente depósitos de metales altamente contaminantes como el mercurio, en consecuencia, estamos comiendo pescados que nos están envenenando”, dijo el senador Navarro.
Como viene siendo denunciado por activistas ambientalistas en todo el territorio nacional, la extracción de oro, tanto en la minería ilegal y legal, requiere del uso de mercurio, un metal líquido altamente contaminante que es vertido y acumulado en los ríos del país.
“Hay un problema de salud pública, pues el mercurio como metal pesado, se acumula en el organismo y puede causar quien sabe cuántas enfermedades”, manifestó el legislador de la Alianza Verde.
Las denuncias del senador se enlazan con las alarmas prendidas por el hallazgo de mercurio en el atún que se distribuye en Colombia. Sobre este particular el senador Jorge Iván Ospina, anunció un debate de control político mediante el que se cuestionará a los dueños de Van Camps, al Invima y al Ministerio de Salud.
Recientemente, el Ministerio de Medio Ambiente, radicó un Proyecto de Ley para que Colombia ratifique el convenio internacional de Minamata como se le conoce al movimiento internacional de prohibición del uso de mercurio en la minería. Hoy por hoy, Colombia es el país latinoamericano que más importa dicho metal.
“Es algo inaceptable, porque no entendemos cómo las autoridades dejan que siga sucediendo sin hacer nada o haciendo muy poquito ¿En cuántos ríos más está sucediendo esto?”, pregunto el senador Navarro.