Crónica de una calificación irreal.

Bogotá D.C., 6 de agosto de 2013.- (Prensa senador Mauricio Ospina). "Qué lejos está de ser real la calificación de 4 sobre 5 que dio el mismo presidente Juan Manuel Santos a su gobierno en diferentes medios de comunicación. En salud está a millones de años luz de acercarse siquiera a un tres raspando", dijo el legislador por el Polo Democrático Alternativo, Mauricio Ospina Gómez.

El legislador se refirió de esta forma a los sondeos y entrevistas que los diferentes medios de comunicación están adelantando con motivo de los 3 años del Gobierno Santos que se cumplen este miércoles.

Las cifras en lo social hablan de coberturas e incrementos fantásticos en materia de seguridad y aspectos sociales, pero la realidad que viven millones de colombianos que se enfrentan día a día con un sistema de salud corrupto, permeado, ineficaz, ineficiente e indolente es otra.

Tanto, que uno de los pocos, o quizás, el único reconocimiento que el actual gobierno hizo de que su gestión no fue tan brillante fue precisamente en la salud. "Y no es para menos: una reforma sin ton ni son, que deja a los intermediadores y negociadores de la vida sin tocar y con sus intereses multimillonarios intactos, a costa de la salud y el acceso a un sistema de calidad que no existe, y una gestión de un Ministro de Salud que fracasó, dejan mucho qué desear", advirtió el senador Ospina.


Dijo que el propio Presidente de la República regañó a su ministro del ramo, Alejandro Gaviria, quien no pasó siquiera la rendición de cuentas del propio Gobierno. "Al señor ministro Gaviria le falta untarse de pueblo. Esa soberbia es la que le ha impedido desarrollar una exitosa gestión como esperamos todos. Nuestras críticas y alertas le han hecho enderezar el camino, pero tantos reverzasos no calan bien dentro de la opinión pública, en especial, en un sector donde está en juego la vida de millones de compatriotas", remarcó Ospina Gómez.


Enfatizó que ahora viene la reforma ordinaria o reglamentaria de la estructural de salud, y que gracias a la presión de los sectores sociales y de los congresistas que piensan en el pueblo, se defendió el derecho a la salud, como fundamental en el país. No está claro aún qué va a pasar con la limitación a la acción de tutela. Ahora un grupo de sabios decidirá entre la vida y la muerte, por un problema netamente económico y de negocio, no de vida y prioridad", concluyó.