Bogotá, 9 de abril de 2017 (Prensa CD). Declaración del expresidente y senador, Álvaro Uribe Vélez, tras retirarse junto a la bancada del Centro Democrático de la sesión del Congreso Pleno, luego de que le fuera negado el derecho a la réplica:
“Dado que las restricciones democráticas en Colombia me impidieron ejercer el derecho a la réplica al interior del Congreso, lo ejerzo aquí enfrente de los ciudadanos y de los periodistas.
En este Domingo de Ramos, día declarado por la Ley para hacer un homenaje a las víctimas, debo decir que el actual Gobierno engañó a las víctimas, les creó una legislación llena de ilusiones y hoy los recursos están congelados. Debo decir que mientras han engañado a las víctimas y las frustran, los victimarios reciben toda clase de beneficios. Se engañó a la opinión pública, se le dijo que no habría impunidad y hoy mientras congelan la asistencia a las víctimas, le dan total impunidad y elegibilidad política a los victimarios.
Debo decir que hay nuevas víctimas en Colombia: los jóvenes de esta creciente drogadicción por la indulgencia de este Gobierno con el narcotráfico. 180 mil hectáreas de droga que hacen víctimas a 80 mil familias campesinas y que destruyen el medio ambiente. Hoy hay nuevas víctimas: la economía. Este Gobierno por cumplirle a las Farc y a la corrupción ha acabado con la economía, al país lo dejan sin inversión, al país lo dejan sin empleo formal, sin confianza, y eso va a llevar a que no haya recursos para las víctimas, porque la atención de las víctimas está profundamente vinculada a que haya una buena economía.
Y hay otra víctima que es la descentralización. Ya el grupo terrorista Farc tiene el desparpajo, el cinismo de exigirle a los alcaldes de Colombia que tienen que acomodar los planes de desarrollo a los caprichos de las Farc. La descentralización que ha avanzado con tantas dificultades en Colombia, hoy es una nueva víctima por los atropellos del terrorismo, permitidos por este Gobierno. Y eso no se va a resolver porque el Comisionado de Santos le llame la atención a las Farc. Las Farc se apoyarán en los acuerdos para seguir atentando contra la descentralización.
Lo que acaba de pasar en este Congreso, donde los gritos de dos o tres se imponen sobre las reglas democráticas, va acreditando que el país avanza hacía la creación de otra víctima: la restricción de la democracia.
El futuro democrático de la Patria está arriesgado, en este día de las víctimas tenemos que llamar la atención para que nuestra democracia no sea la nueva víctima de estos abusos de Santos, la corrupción y el terrorismo.
Cuando escuchábamos esta sesión y el presidente (del Congreso, Mauricio Lizcano) nos negaba el derecho a la réplica, por dos o tres gritos que se amparaban en la noble mención de las víctimas, venía a nuestra mente lo que ocurre en Venezuela; allí en nombre de los pobres los han empobrecidos más; en nombre de la democracia han encarcelado e inhabilitado a la oposición, ahora las cinco figuras más importantes de la oposición están encarceladas o están inhabilitadas.
Con la impunidad, la elegibilidad política de delincuentes, esa atrocidad que cometieron de desconocer el Plebiscito, y que la Corte Constitucional le permitiera al Gobierno sustituir el veredicto popular por una proposición del Congreso, hay una nueva víctima: nuestra democracia, la soberanía popular, nuestra Constitución.
Hay otras víctimas: muchos colombianos, y en muchas regiones, extorsionados. Ya se niegan a denunciar porque no encuentran ante quién hacerlo. Como no hay protección de autoridades, ellos prefieren pagarle a los extorsionistas que acudir a cumplir el deber de denunciar.
Nosotros le decimos a los colombianos que hay muchos temas que revocar, porque el camino que llevamos no es el camino de la paz, sino el camino de la Venezuela de Maduro.
Nos engañan con las armas para victimizar a más colombianos. Anunciaron que había 40 mil armas de las Farc, después Santos dijo que 14 mil, ahora anuncian la entrega de 7 mil. En muchas partes se denuncia que desde los campamentos y las zonas de Farc están enviando las armas a los milicianos, para mantener a los milicianos armados, que además siguen en la clandestinidad, sin sometimiento alguno a la justicia, sin que se les visibilice.
Siguen las víctimas infantiles, siguen los 11.800 niños que fueron secuestrados por las Farc sin regresar a su libertad, sin que a sus familias se les pida perdón, sin que ese horror que se cometió con Colombia se pueda superar.
Por eso nosotros apoyaremos la desmovilización, pero lucharemos en las calles de Colombia para revocar esta justicia que se ha creado en la dictadura de las Farc, para revocar esta impunidad y para que el país pueda avanzar por un camino diferente.